Según las últimas noticias la píldora de “El día después” ya no se podrá comprar en la farmacia sin receta médica, sino que requerirá de supervisión médica tal y como se resolvía antes del año 2009. Esto es lo que apunta el nuevo gobierno con respecto a la polémica decisión tomada por el partido anterior y que además supone una ruptura con todas las decisiones tomadas con respecto a la ley del aborto, que también será posible objeto de cambios en un futuro no muy lejano.
Este cambio en la forma de dispensación de la píldora del día después no requiere de grandes gestiones ya que se trata de una orden ministerial que dependerá tan solo de la persona que tome el relevo en el cargo. No supone ningún coste extra para las arcas sanitarias ya que este medicamento no está financiando por la Seguridad Social.
Evidentemente los grandes perjudicados en esta vuelta atrás son los laboratorios farmacéuticos que fabrican dicha pastilla puesto que la libre obtención de la misma había hecho incrementar su consumo de forma exponencial. Es previsible que haya una negociación intensa al respecto y también que pueda haber ciertos retrasos en su implementación como consecuencias de las grandes preocupaciones de los ciudadanos y el gobierno en estos momentos, el paro y la crisis económica.
Funciones de la píldora postcoital
En general se trata de un método anticonceptivo de urgencia puesto que se utiliza en un plazo determinado después de haber tenido relaciones sexuales sin protección o como consecuencia de un fallo de cualquier otro método anticonceptivo, con la finalidad de evitar un embarazo no deseado. El índice de éxito de esta técnica es bastante elevado y su mecanismo de acción más común es a nivel de ovulación, retrasándola o impidiéndola.
La conocida como Píldora del día después más habitualmente es Levonorgestrel, compuesta en exclusiva por progestinas. Existen otros mecanismos de urgencia como puede ser la Píldora de los 5 días después, Acetato de Ulipristal que no son de contenido hormonal y con una eficacia también muy elevada. En función de dónde nos encontremos es más común un medicamento u otro, en China y Rusia por ejemplo Levonorgestrel y Acetato de Ulipristal no son las píldoras más comunes y se utiliza más la Mifepristona como anticonceptivo de emergencia. En ningún caso de trata de un píldora abortiva y no provoca abortos sino que impiden que se produzca la fecundación o que se implante en útero.
Efectos secundarios
Los síntomas más habituales son molestias leves como dolor de cabeza, en el pecho, alteraciones de la menstruación (sangrados o retrasos) y también molestias gastrointestinales. Es posible que en las horas siguientes al consumo puedan ocurrir mareos, naúseas, dolor en la parte baja del abdomen. También es habitual se note el pecho más sensible y puede que acuse cierto cansancio.
En algunos casos, no tan frecuentemente, se dan vómitos y diarreas.
Opiniones acerca de la píldora
Como siempre estos temas son sumamente controvertidos, la opinión depende de la ética de cada uno, de su ideología, de su religión etc. Lo cierto es que desde que entró en vigor la conocida como Ley Aído, la cifra de abortos en España alcanzó un máximo histórico y existen muchos grupos que se oponen a la posibilidad de que las menores puedan abortar sin consentimiento paterno y que se expida la píldora sin necesidad de receta ni supervisión médica. Lo más inmediato mientras se llega a un acuerdo al respecto es la educación de nuestros adolescentes en materia sexual para evitar que tanto una como otra medida sea necesaria.
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Creo que si el consumo de la píldora ha aumentado es consecuencia de una disminución de embarazos no deseados, por lo que lo encuentro un dato muy positivo.
Han aumentado los abortos a pesar de la píldora esta que es abortofaciente. Eso sin contar que la población femenina en edad fértil ha disminuido.