Cuando la mujer llega a la décima semana del embarazo, tendrá menos náuseas y vómitos en comparación con el inicio de la gestación. Sin embargo, presentará otras molestias típicas como las ganas frecuentes de orinar, el aumento de la salivación, los gases o las arañas vasculares.
Su barriga aún no se notará especialmente, pero la mujer puede sentir su vientre hinchado y observar un aumento del peso.
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Por Marta Barranquero Gómez (embrióloga), Silvia Azaña Gutiérrez (embrióloga) y Zaira Salvador (embrióloga).
Última actualización: 27/09/2023