Cada vez tenemos más problemas para tener hijos, se ha observado que somos la mitad de fértiles que lo fueron nuestros abuelos.
Entre las causas de este descenso en la fertilidad encontramos la exposición diaria a tóxicos presentes en el ambiente y que uno no se entera ni piensa que puedan tener tanta repercusión.
El aumento de contaminación, la calidad del aire, los tóxicos presentes en pesticidas, disolventes, plásticos, materiales como el teflón que se usa en muchos de los objetos utilizados diariamente y un sinfín de compuestos y utensilios con los que convivimos y que poco a poco están teniendo una influencia negativa en nuestro organismo.
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Por Teresa Rubio Asensio (embrióloga).
Última actualización: 13/05/2015
