¿Qué se puede mejorar aún en las técnicas de reproducción asistida?

Las técnicas de reproducción asistida han ido evolucionando rápidamente en los últimos años, pero muchas de ellas aún pueden resultar dañinas para los gametos y/o embriones, y por tanto, todavía se pueden mejorar. Algunas de las técnicas que se podrían mejorar son:

PGT

el test genético preimplantacional permite saber si los embriones tienen el número de cromosomas adecuado antes de ser transferidos. Para ello, se necesita hacer una biopsia del embrión, que implica quitarle algunas células, lo que pone en riesgo su integridad. Hay mucho que mejorar en cuanto a métodos de diagnóstico genético no invasivos y su capacidad de detectar alteraciones cromosómicas.

Hatching asistido

la eliminación de fragmentos en los embriones puede suponer un beneficio para aquellos que presentan un elevado grado de fragmentación, pero en ocasiones la técnica conlleva un riesgo para los embriones que es mayor que el beneficio que podemos obtener.

Calidad ovocitaria

sería muy beneficioso mejorar las técnicas para detectar la calidad de los ovocitos antes de extraerlos, por ejemplo, buscando biomarcadores ovocitarios. Aunque no podamos mejorarla, conocer la calidad ovocitaria puede ayudar a las pacientes a elegir otro tratamiento, como una ovodonación, antes de someterse a un proceso que requiere medicación y una punción ovárica.

Hay muchas técnicas que aún se pueden perfeccionar y esta mejora debe ir dirigida a maximizar los recursos para optimizar los resultados, es decir, debemos enfocarnos en mejorar la calidad por encima de la cantidad, con el objetivo de conseguir un niño sano en casa con el menor consumo de tiempo, medicación, material de laboratorio y material biológico y, sobre todo, un menor desgaste psicológico para los pacientes.