El proceso de criopreservación de los óvulos se realiza mediante la técnica de vitrificación, que utiliza velocidades de enfriamiento ultrarrápidas. Sin embargo, para proteger los óvulos y que no se dañen durante el proceso, es necesario utilizar sustancias crioprotectoras, las cuales sustituyen el agua intracelular de los óvulos y evitan la formación de cristales de hielo.
Por tanto, antes de sumergir los óvulos en nitrógeno líquido, hay que pasarlos por unos pocillos que contienen las sustancias crioprotectoras. Después de este proceso, los óvulos deben depositarse con mucho cuidado sobre el soporte utilizado para la vitrificación (el más habitual hoy en día es el Cryotop de la marca Kitazato).
Puedes leer el artículo completo en: ¿Qué es la vitrificación de óvulos y cuáles son sus ventajas? ( 245).
Por Aurea García Segovia (embrióloga), Dra. Claudia Flores (ginecóloga), Felipe Gallego Terris (embriólogo), Laura Molina Sotomayor (embrióloga), Dra. Marta Zermiani (ginecóloga), Marta Barranquero Gómez (embrióloga), Silvia Azaña Gutiérrez (embrióloga), Victoria Moliner (embrióloga) y Zaira Salvador (embrióloga).
Última actualización: 18/06/2024