Cuando una mujer tiene una cantidad demasiado elevada de células NK en su sangre, es posible que tenga dificultad para lograr el embarazo. Esto es debido a que las células NK ataca al embrión durante sus primeros momentos de desarrollo, ocasionando un aborto espontáneo.
Algunos estudios indican que las células NK provocan un menor flujo sanguíneo en el útero, lo que podría ser el mecanismo por el que tienen lugar los abortos espontáneos.
Puedes leer el artículo completo en: Aborto causado por ataque de las células Natural Killer al embrión ( 476).
Marta Barranquero Gómez
Graduada en Bioquímica y Ciencias Biomédicas por la Universidad de Valencia (UV) y especializada en Reproducción Asistida por la Universidad de Alcalá de Henares (UAH) en colaboración con Ginefiv y en Genética Clínica por la Universidad de Alcalá de Henares (UAH).
Número de colegiada: 3316-CV