Silvia Azaña. embrióloga en Reproducción Asistida ORG, nos cuenta en este vídeo la forma de diagnosticar la endometritis en la mujer:
Además de realizar una revisión ginecológica en la que útero y cérvix pueden mostrar sensibilidad, existen diferentes pruebas diagnósticas para la endometritis. Entre ellas, se encuentran las siguientes:
Cultivo microbiano endometrial: se toma una muestra para la detección e identificación de microorganismos cultivables.
Biopsia endometrial: la muestra obtenida se emplea para identificar por inmunohistoquímica células plasmáticas CD138+.
Histeroscopia: permite la visualización de la cavidad uterina. En ocasiones, es posible observar edema estromal, hiperemia epitelial y/o micropólipos.
Por otro lado, especialmente tras fallos de implantación o aborto de repetición, en las clínicas de reproducción asistida pueden recomendar la realización del test ALICE.
El test ALICE permite identificar patógenos responsables de la endometritis crónica cultivables y no cultivables (que no serían detectables en cultivo), ya que es un examen de tipo molecular. Además, puede recomendar el tratamiento más adecuado para las bacterias encontradas.
Y en este punto es importante mencionar que muchas pacientes no están conformes con las pruebas de fertilidad que les piden. Esto les genera inseguridades y dudas. La solución la tienes en nuestra guía Fertilidad con Cabeza.
