¿Cuáles son los síntomas de embarazo semana a semana?

En general, la mayoría de las mujeres embarazadas presentan los siguientes síntomas, aunque la gravedad o intensidad con la que los sienten es variable. A continuación, os presentamos los más comunes:

Ausencia de regla o amenorrea

en mujeres con ciclos regulares, aproximadamente una semana de retraso puede ser indicio de embarazo. Sin embargo, es difícil asegurar que exista embarazo, ya que la menstruación se puede retrasar o no presentar un mes por otra serie de circunstancias.

Náuseas y vómitos

suelen aparecer típicamente por la mañana al levantarse o después de desayunar, y son debidas a la alteración hormonal que se produce en el cuerpo después de que el embrión implante en el útero.

Dolor parecido al premenstrual

es común que se sientan dolores similares a los que algunas mujeres experimentan antes de la menstruación, dolores continuos y sordos en la parte baja del abdomen. Suelen ocurrir durante las primeras semanas de embarazo, cuando la mujer aún no sabe que está embarazada.

Cambios en el pecho

se da un aumento de tamaño y de la sensibilidad. La aureola del pezón puede volverse más oscura y aparecer dolor de pezón. También aumenta la irrigación sanguínea por lo que pueden notarse las venas.

Manchas en la piel

aparecen debido a las hormonas del embarazo. Suelen desaparecer tras el parto. Se conoce como cloasma.

Flujo vaginal

aumentan las secreciones vaginales para evitar que el bebé adquiera infecciones.

Aumento de las ganas de orinar

el útero comienza a crecer durante las primeras semanas de embarazo, por lo que puede presionar la vejiga impidiendo que esta se llene completamente de orina. Después de las primeras semanas el útero crece hacia arriba para ocupar la cavidad pélvica, por lo que se libera la presión de la vejiga.

Cansancio y sueño

durante las primera semanas suele ser normal tener ganas de dormir a lo largo de todo el día y sentir un gran cansancio. Esto suele remitir a las pocas semanas, pero hay casos en los que persiste durante todo el embarazo.

Cambios en el gusto y olfato

los cambios hormonales pueden producir alteraciones en el gusto y el olfato. Por ello, es normal que surjan antojos de ciertos alimentos o incluso aversión o rechazo hacia otros, ya que la percepción es más intensa.

Mareos y desmayos

los cambios hormonales de progesterona y estrógenos modifican el flujo sanguíneo, haciendo que vaya más sangre hacia el útero y que el flujo sea más lento, por lo que puede ocurrir que no llegue suficiente sangre al cerebro durante algunos momentos y que ocurran desmayos o mareos.

Aumento de peso y volumen

se da un aumento de entre 0,5 y 1,5kg al mes, aunque es muy variable. El aumento más significativo se da en el tercer trimestre.

Estrías

son más frecuentes en pechos, piernas y tripa. Se deben al estiramiento excesivo de la piel que se produce por el aumento de volumen.

Antojos

pueden deberse a que el cuerpo requiere alguna vitamina o mineral, aunque no hay ninguna explicación científica. También se puede alterar el apetito y puedes pasar de tener hambre a tener náuseas en poco tiempo.