No. La inseminación artificial (IA) es una técnica de reproducción asistida sencilla que no requiere anestesia y no es dolorosa. Pese a ello, algunas mujeres sienten ligeras molestias o pequeños síntomas como cólicos o dolor abdominal después de la inseminación artificial, pero desaparecen a los pocos días.
De no ser así, o si el dolor es de gran intensidad, lo mejor sería comunicárselo al especialista para que esté al corriente de la situación. consultar con el especialista.
Puedes leer el artículo completo en: ¿Qué hacer después de la inseminación artificial? Betaespera y consejos ( 1399).

Marta Barranquero Gómez
Graduada en Bioquímica y Ciencias Biomédicas por la Universidad de Valencia (UV) y especializada en Reproducción Asistida por la Universidad de Alcalá de Henares (UAH) en colaboración con Ginefiv y en Genética Clínica por la Universidad de Alcalá de Henares (UAH).
Número de colegiada: 3316-CV