Antes de profundizar en la relación entre las pastillas anticonceptivas y los folículos antrales, es fundamental entender cómo funcionan estas píldoras. Las pastillas anticonceptivas son un método común de control de la natalidad que contienen hormonas sintéticas, generalmente derivados de estrógeno y derivados de progesterona. Estas hormonas evitan la ovulación al suprimir la liberación de la hormona luteinizante (LH) y la hormona folículo estimulante (FSH) en el cerebro, es decir, bloquean la función ovárica.
En el ciclo menstrual normal, los ovarios albergan varios folículos antrales, que son pequeñas estructuras que contienen óvulos inmaduros. A medida que el ciclo progresa, uno de estos folículos se desarrolla y madura, liberando un óvulo en el proceso de ovulación. Esto es lo que permite la posibilidad de fertilización y embarazo.
Las pastillas anticonceptivas reducen el número de folículos antrales en los ovarios. Esto es un efecto secundario de su mecanismo de acción. Al suprimir la ovulación, las hormonas de las pastillas anticonceptivas detienen el crecimiento y la maduración de los folículos antrales.
Cabe destacar que este efecto no es permanente. Cuando una persona deja de tomar pastillas anticonceptivas, sus ovarios generalmente recuperan la capacidad de producir folículos antrales y óvulos maduros. El tiempo que lleva este proceso puede variar de una persona a otra.
En mujeres que llevan muchos meses tomando anticonceptivos orales, el recuento de folículos antrales puede verse disminuido en la ecografía al estar los ovarios con su actividad frenada. En función de cada paciente, puede ser necesario pruebas adicionales para valorar la reserva ovárica, como por ejemplo, la hormona anti mülleriana (AMH).
La reducción temporal de los folículos antrales debido al uso de pastillas anticonceptivas no debería ser motivo de preocupación para la mayoría de las personas. Una vez que decidas buscar un embarazo, tu capacidad de producir óvulos generalmente se restaurará. Sin embargo, si tienes preocupaciones específicas sobre tu fertilidad, es una buena idea hablar con un profesional de la salud o un especialista en fertilidad.
