Sí. Cuando hay líquido visible dentro de la cavidad endometrial en el momento de la transferencia embrionaria, las tasas de implantación y embarazo suelen ser peores.
¿Por qué puede haber líquido?
Algunos de los motivos por los que puede haber líquido en el endometrio son los siguientes:
- Hidrosálpinx: se trata de una obstrucción distal o medial de la trompa de Falopio que provoca que el fluido que produce la trompa de forma natural quede acumulado.
- Estimulación ovárica y endometrio hiperestrogénico: un ambiente hiperestrogénico favorece la secreción y acumulación transitoria de fluido dentro de la cavidad.
- Endometritis: existencia de una infección debido al sobrecrecimiento bacteriano intracavitario.
- Patología intracavitaria: la existencia de adherencias, sinequias, miomas, pólipos o incluso cicatrices de cirugías previas pueden provocar esta acumulación de líquido.
- Estenosis cervical: que impide un correcto vaciamiento de la cavidad.
- Istmocele: se trata de una cavidad que se forma en la pared anterior del útero, justo en el sitio donde se realizó una cesárea, que acumula líquido que descarga a la cavidad.

¿Por qué disminuyen las tasas de éxito si hay liquido en la cavidad?
La implantación embrionaria es un proceso muy delicado que requiere una interacción precisa entre un embrión y un endometrio receptivo. Cualquier alteración en ese “microambiente” puede romper el equilibrio.
El líquido dentro de la cavidad endometrial altera este entorno de varias maneras:
- Efecto mecánico: si el líquido está presente en la cavidad durante o después de la transferencia, puede desplazar o arrastrar físicamente al embrión, impidiendo su contacto estable con el epitelio endometrial. Esto se conoce como efecto de “flushing” o lavado mecánico.
- Efecto bioquímico: el fluido intracavitario no es un líquido fisiológico uterino, sino que suele ser un trasudado o secreción anómala con alto contenido de citoquinas inflamatorias, prostaglandinas, toxinas y radicales libres. Todo ello genera un ambiente proinflamatorio y embriotóxico que puede alterar el desarrollo temprano del blastocisto.
- Efecto sobre la receptividad endometrial: el contacto continuo del endometrio con líquido puede alterar la expresión de genes receptivos clave, como LIF, integrina αvβ3, HOXA10 y pinópodos. Estos marcadores son fundamentales para que el embrión “reconozca” y se adhiera al endometrio. Cuando el fluido está presente, especialmente de forma persistente, el epitelio endometrial tiende a mantener una morfología inmadura y menos receptiva.
- Interferencia con la dinámica endometrial: el líquido puede generar presión intraluminal anómala que distiende la cavidad, cambia la orientación de las células epiteliales y dificulta la adhesión embrionaria inicial. Además, puede alterar los gradientes moleculares de iones y proteínas que guían la implantación.
¿Cuánto “es mucho”? (el matiz del “poquito”)
Un metanálisis reciente sugiere que cualquier fluido visible dentro de la cavidad se asocia a peores tasas y que el punto de corte ~3,5 mm agrava el impacto.
- Series históricas y cohortes modernas replican esa tendencia: menor embarazo clínico y recién nacido vivo cuando el líquido persiste el día de la transferencia.
- Habiendo descartado causas anatómicas previamente descritas, si el fluido se resuelve espontáneamente antes de transferir (p. ej., al iniciar progesterona o en controles sucesivos), los resultados son similares a los de pacientes sin fluido.
A modo de conclusión:
- Un “poco” de líquido que ocupa la cavidad en el momento de la transferencia puede perjudicar la implantación.
- Si desaparece antes de transferir, no parece afectar.
- La mejor estrategia es no transferir sobre líquido visible: posponer y tratar la causa subyacente.
Puedes leer el artículo completo en: ¿Cómo mejorar las tasas de implantación en reproducción asistida? ( 72).

Dr. Adolfo De Prados Alonso
El Dr. Adolfo de Prados estudió Medicina y Cirugía en la Universidad de Valencia y seguidamente se especializó en Ginecología y Obstetricia. El doctor ha realizado estancias formativas por España y ha estudiado diversos cursos de especialización.
El Dr. de Prados tiene en una larga trayectoria en el campo de la medicina reproductiva y ha participado en diferentes congresos y sociedades científicas.
El Dr. de Prados tiene en una larga trayectoria en el campo de la medicina reproductiva y ha participado en diferentes congresos y sociedades científicas.
Número de colegiado: 464623286