En un ciclo normal, tras la ovulación, la progesterona empieza a subir para que el tejido endometrial pueda modificarse y permitir así la implantación y el desarrollo del eventual embrión. Cuando realizamos una transferencia embrionaria, lo que necesitamos es reproducir esta situación para que el embrión pueda implantarse.
Normalmente, el tratamiento con progesterona empieza unos días antes de la transferencia embrionaria. En caso de transferencia en el mismo ciclo de la punción folicular, se empieza el mismo día de la punción, sino varía según el estadio de desarrollo embrionario.
En caso de transferencia en ciclo natural (cuando no se da tratamiento hormonal para preparar el endometrio), la progesterona se empieza el mismo día de la transferencia, pero es muy poco probable que no se tenga que tomar progesterona después de la transferencia embrionaria porque se prefiere siempre dar soporte en la fase lútea con progesterona exógena.
Lectura recomendada: Hormona progesterona: funciones, valores normales y medicamentos.
