Silvia Azaña, embrióloga en Reproducción Asistida ORG, nos cuenta en este vídeo por qué se producen cambios en el gusto y en el olfato durante el embarazo:
Es posible que la mujer embarazada rechace, incluso por su olor, alimentos que antes del embarazo tomaba de manera habitual y ahora le producen náuseas, sin olvidar los conocidos antojos de un alimento o plato concreto que comienza a apetecer de una manera inusual y exagerada.
Estos cambios en los gustos y las preferencias por las comidas son habituales en el embarazo por los cambios hormonales y el agudizamiento del olfato y del gusto. No obstante, se debe tener en consideración que estos antojos y aversiones no afecten a que la dieta de la embarazada siga siendo saludable equilibrada y variada para que no falte ningún nutriente ni a la embarazada ni al bebé.