Los coágulos menstruales son una mezcla de células sanguíneas, tejido de revestimiento del útero y proteínas que ayudan en la coagulación o regulan el flujo menstrual. Ocurren generalmente cuando el flujo menstrual es abundante, siendo más comunes durante los primeros días del ciclo. El color de los coágulos puede ser brillante o de un color rojo más denso u oscuro hacia el final del ciclo.
Durante el ciclo menstrual, las células endometriales que recubren la cavidad uterina se desprenden y salen del cuerpo. A medida que esto sucede, se liberan proteínas que hacen que la sangre del útero se coagule y esta coagulación evite que los vasos sanguíneos del revestimiento uterino sigan sangrando. Cuando el flujo menstrual es más abundante, las proteínas de coagulación (factores de coagulación) o la formación de fibrina, también se expulsan con el sangrado menstrual pudiéndose observar coágulos transparentes, amarillo o blanquecinos.
No obstante, es importante consultar con su médico para la solución de cualquier duda y descartar cualquier patología agregada que pudiera estar condicionando la presencia de coágulos durante la menstruación.