La congelación de semen es una técnica de baja complejidad en el campo de la reproducción asistida. El hombre debe obtener la muestra seminal mediante masturbación y en el laboratorio se le añadirán crioprotectores para evitar dañar la muestra.
El proceso se lleva a cabo mediante congelación lenta y el semen podrá mantenerse a baja temperatura durante un tiempo indefinido. Normalmente, la congelación del semen se recomienda en pacientes oncológicos, pacientes que van a someterse a una vasectomía, pacientes con baja calidad espermática y/o pacientes con dificultad para obtener la muestra el día de la punción ovárica o la inseminación de la pareja.
Además, el semen de donantes de esperma también es congelado durante un periodo mínimo de 6 meses para confirmar la ausencia de cualquier infección.