En la semana 14 de embarazo, ya es posible distinguir todas las estructuras del feto en una ecografía y medir por separado la cabeza, el abdomen y el fémur. Las medidas aproximadas del bebé en esta semana 14 se sitúan entre los 8-10 cm, más o menos el tamaño de un limón, y su peso debe ser de unos 25-40 g.
Por otra parte, la alimentación del bebé ya depende únicamente de la placenta y la vesícula vitelina ha desaparecido. Los nutrientes y el oxígeno necesarios para seguir con su desarrollo llegan al feto a través del cordón umbilical y la sangre materna.
Puedes leer el artículo completo en: Semana 14 de embarazo: inicio del segundo trimestre ( 466).
Por Marta Barranquero Gómez (embrióloga) y Zaira Salvador (embrióloga).
Última actualización: 19/12/2023
