Si la mujer embarazada se encuentra en la semana 37 de gestación, puede que le realicen la prueba del estreptococo del grupo B. Se trata de un cribado para comprobar si la mujer es portadora o no de este microorganismo (ya que puede estar presente en la mujer sin ocasionar ningún síntoma).
En el caso de que la mujer sea portadora, durante el parto se le administrarán antibióticos, para reducir el riesgo de contagio al bebé con este microorganismo, puesto que podría causarle complicaciones importantes como meningitis.
Además, si el bebé se presenta de nalgas, durante la semana 37 de gestación pueden ofrecer a la mujer realizar una versión cefálica externa para intentar dar la vuelta al bebé y colocarlo en posición cefálica.
Puedes leer el artículo completo en: Semana 37 de embarazo: ¿Qué cambios hay en el bebé y en la madre? ( 200).
Por Andrea Rodrigo (embrióloga) y Silvia Azaña Gutiérrez (embrióloga).
Última actualización: 26/07/2022