La ecografía es una prueba diagnóstico que no resulta peligrosa ni para la embarazada ni para el feto. A través de la ecografía es posible evaluar el desarrollo fetal, así como diagnosticar posibles malformaciones.
Sin embargo, pese a que no se observe ninguna alteración ecográficamente, no quiere decir que el feto no posea anomalías. Algunas de ellas no se pueden observar a través de una prueba ecográfica.
Puedes leer el artículo completo en: ¿Cómo es la ecografía fetal en el primer, segundo y tercer trimestre? ( 94).
Por Marta Barranquero Gómez (embrióloga) y Teresa Rubio Asensio (embrióloga).
Última actualización: 23/02/2023