Esta alteración del testículo puede ser congénita o adquirida y se corresponde con la acumulación de líquido entre el escroto y el testículo. Puede ser unilateral o bilateral.
En principio no afecta a la fertilidad masculina pero sí puede producir algunas molestias y, por tanto, suele ser operado si no desaparece por sí solo.
Puedes leer el artículo completo en: La esterilidad masculina por un factor testicular congénito o adquirido ( 495).
Por Dra. Arantxa Pérez Garrido (ginecóloga), Marta Barranquero Gómez (embrióloga) y Zaira Salvador (embrióloga).
Última actualización: 03/08/2017