Tener los pies hinchados es una molestia habitual en las mujeres embarazadas. La circulación sanguínea y el retorno venoso se ve dificultado durante el embarazo por el aumento de presión que ejerce el bebé y el útero sobre los vasos sanguíneos de las piernas. Esto lleva a la retención de líquidos y, por tanto, a la hinchazón de tobillos, pies y piernas.
Podrás encontrar algunos consejos para aliviar esta dolencia en el siguiente artículo: ¿Es normal el dolor de piernas durante el embarazo? ¿A qué se debe?
Puedes leer el artículo completo en: Cambios en el bebé y molestias habituales en la semana 33 de embarazo ( 535).
Silvia Azaña Gutiérrez
Graduada en Biología Sanitaria por la Universidad de Alcalá y especializada en Genética Clínica por la misma universidad. Máster en Biotecnología de la Reproducción Humana Asistida por la Universidad de Valencia en colaboración con el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI).
Número de colegiada: 3435-CV