El Omifin, o citrato de clomifeno, es un antiestrógeno. Su acción consiste en unirse a los receptores de estrógenos que hay a nivel cerebral, de modo impide que los estrógenos reales se unan a estos receptores. El cerebro “engañado” por el Omifin, detectará niveles bajos de estrógenos y aumentará el estímulo hacia los ovarios para que estos se pongan en funcionamiento.
Debido a este efecto, el Omifin es útil en mujeres con anovulación provocada principalmente por el síndrome de ovario poliquístico (SOP). En estas mujeres los niveles basales de estrógenos son altos y las reglas muy irregulares o incluso inexistentes debido a una ausencia de ovulación. Gracias al Omifin se puede conseguir la ovulación hasta en el 80% de mujeres con SOP, brindando la oportunidad de conseguir embarazo con relaciones sexuales dirigidas. La posibilidad de gestación por cada intento en caso de conseguir la ovulación y ausencia de otras causas de esterilidad será de un 15- 20%.
El tratamiento con Omifin requiere de controles ecográficos para detectar una posible hiperrespuesta a la medicación con desarrollo de múltiples folículos que podrían dar lugar a gestaciones múltiples.
Se consideran mujeres resistentes al Omifin aquellas que no ovulan con dosis superiores a 150mg/día al menos 3 ciclos consecutivos, y ocurre en el 15-40% de mujeres con SOP. La probabilidad de respuesta disminuye con la edad, la resistencia a la insulina, el hiperandrogenismo y el índice de masa corporal.
Durante mucho tiempo también se ha utilizado el Omifin en casos de parejas jóvenes con esterilidad de origen desconocido y de poco tiempo de evolución. Sin embargo, en una mujer con reglas regulares, el Omifin no aumenta las posibilidades de embarazo, ya que estas mujeres ovulan todos los meses. Sólo será útil en mujeres con anovulación para corregir precisamente este problema.