En la séptima semana de embarazo, ya debe verse el embrión dentro del saco gestacional y, además, es muy probable que también se escuchen los latidos cardíacos del embrión. Si esto no es posible, el ginecólogo puede sospechar que ha tenido lugar un embarazo anembrionario, en el que se observa el saco gestacional pero el embrión no está dentro porque ha detenido su desarrollo muy tempranamente.
Para obtener más información sobre este tema, te recomendamos visitar el siguiente artículo: ¿Qué es el embarazo anembrionado?
Puedes leer el artículo completo en: Semana 7 de embarazo: ¿cómo están el bebé y la madre? ( 587).
Zaira Salvador
Licenciada en Biotecnología por la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), Biotechnology degree en la National University of Ireland en Galway (NUIG) y embrióloga con el Máster en Biotecnología de la Reproducción Humana por la Universidad de Valencia en colaboración con el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI).
Número de colegiada: 3185-CV