Opiniones sobre nuestro proceso de FIV

¡Buenas noches!

Bueno tiempo sin escribir ni preguntar por aquí. Bueno os resumo de nuevo nuestro caso, ya que ahora nos estamos sometiendo a una FIV en una clínica privada, y quería vuestra real, y verdadera opinión.

Mujer 38 años sin patologías ni enfermedades. Endometritis crónica tratada. Antimulleriana 0.48 – FSH 4.06 mUI/mL – TSH 3.06 UI/mL – estradiol 132.40 pg/mL (análisis del 29 de enero). Hemos sufrido 3 abortos en torno a la semana 8-10 (1 natural y dos químicos, sin ver embrión en ningún caso). Tomándose infinitas vitaminas, ácidos fólicos, eutirox…

Hombre 36 años sin patologías ni enfermedades. El único valor alterado 2% de espermatozoides normales (alimentación sana, seidiferty, cúrcuma negra, ejercicio y no bebo ni fumo).

Nos recomiendan FIV+ICSI. Hacemos la estimulación. Estradiol antes de venir la regla, una vez viene, benfola 225 (pastizal), meriofert 75 (pastizal), y posteriormente decapeptyl 0.1, y 36 horas antes, el ovitrelle. Se realizan dos controles ecográficos para ver el crecimiento de los folículos en días alternos. Al llegar a tamaño mayor que 20mm dos de ellos, nos dicen que el lunes mismo la punción. Sacan solo 1 maduro, cuaja, crece, día 5 ok (aunque pequeño) el 6o día, al pincharle para analizar DGP, se “deshace” (palabras del embriólogo), y que no tiene “fuerza”. Diagnóstico principal: mala calidad del gameto, pero nada más. Dudas de lo que se pudo y no fue al final:

1. ¿Por qué no se hacen controles de estradiol durante la estimulación?

2. ¿Por qué medican de primeras con medicación “genérica”? Es decir, ¿por qué no personalizan la medicación que realmente necesita la paciente, según TODOS sus valores analíticos?

3. ¿Por qué no puedo saber, ni un informe en el que se explique exactamente qué ha pasado? O ver la evolución del embrión? (Parece que lo que pasa en el laboratorio…ahí se queda).

Perdón por la chapa, pero estamos hartos de dinero, tiempo, psicológico y todo. Hemos valorado fuertemente la ovodonación, porque estamos muy cansados al menos yo, y mi mujer Ana no lo está pasando nada bien. ¡Saludos!