Una pareja con esterilidad secundaria es aquella en la que, aún habiendo tenido un hijo previamente, no consigue otro embarazo para ampliar la familia. La principal causa de esta infertilidad es la edad materna, ya que la reserva ovárica de la mujer disminuye conforme va cumpliendo años.
Existe una gran diferencia entre las mujeres que previamente han tenido un hijo o más y ahora no pueden lograr un nuevo embarazo, y aquellas que están luchando contra la infertilidad porque aún no tienen hijos.
Aun así, las parejas que experimentan infertilidad secundaria tienen los mismos sentimientos de culpa, negación, enojo, depresión y frustración. Además, tienen la preocupación adicional por la forma en que sus acciones y emociones pueden afectar al hijo o los hijos que ya tienen.