Llevar a cabo un diagnóstico y un tratamiento temprano del istmocele es esencial para reducir las complicaciones que puede conllevar esta afección uterina. Las pruebas más importantes para detectar el istmocele son la ecografía endovaginal y la histeroscopia.
En cuanto a las opciones de tratamiento, se puede optar por el uso de anticonceptivos orales para reducir el tamaño del tejido cicatricial y ayuda a restaurar el endometrio. Además, la esección histeroscópica es un tratamiento que elimina el tejido cicatricial y también puede realizarse con una cirugía mínimamente invasiva llamada laparoscopia.
Puedes leer el artículo completo en: ¿Qué es el istmocele uterino? ¿Por qué causa infertilidad secundaria? ( 75).
Por Marta Barranquero Gómez (embrióloga).
Última actualización: 21/02/2024