Los controles ecográficos son necesarios durante la estimulación ovárica para comprobar que el ovario tiene una respuesta adecuada a la medicación hormonal.
Cuando el ovario no responde bien a las hormonas administradas, es posible que suceda un caso de baja respuesta o una ovulación espontánea. Una baja respuesta significa que, de todos los folículos primordiales que tenía la mujer en su cohorte ovárica, solamente consiguen madurar 2 o 3 hasta convertirse en folículos antrales.
En el caso de la ovulación espontánea, la medicación que sirve para frenar la hipófisis no ha funcionado correctamente y el pico de LH liberado hace que los óvulos salgan al exterior y no se puedan recuperar por punción folicular.
En función de cuál sea la situación en una mala respuesta ovárica, será necesario cancelar el ciclo o tomar medidas para no perder este intento.