La costra láctea es habitual en los bebés, pero no es una enfermedad como tal. Además, esta afección no es contagiosa, no es una alergia, no duele y sobre todo, no es grave.
Lo habitual es que la costra láctea aparezca en los primeros meses de vida del bebé, pero con unos sencillos cuidados y dejar pasar el tiempo irá desapareciendo.
Pese a que lo más frecuente es encontrar costra láctea en el cuero cabelludo del bebé, lo cierto es que también puede aparecer en otras zonas como los párpados, cejas, frente, ingles, etc.
Puedes leer el artículo completo en: ¿En qué consiste la costra láctea y cuáles son sus síntomas y soluciones? ( 290).
Por Marta Barranquero Gómez (embrióloga).
Última actualización: 17/01/2023