Cuidados del recién nacido

Por (embrióloga).
Actualizado el 01/03/2016

Una vez se ha producido el nacimiento del bebé y tras pasar de 2 a 5 días en el hospital hasta que le dan el alta a la madre, llega el momento de volver a casa con el recién nacido.

En esta nueva etapa, es importante conocer qué cuidados básicos requerirá el bebé, ya que un recién nacido necesita atenciones especiales las 24 horas del día.

A continuación tienes un índice con los 6 puntos que vamos a tratar en este artículo.

Es normal sentir miedo o incertidumbre y no saber cómo actuar en cada momento. Al principio os costará un poco, pero transcurridas las primeras 24 horas solos con el bebé, ya se empiezan a reconocer los llantos, quejidos y estados de ánimo de éste.

A continuación os detallamos los cuidados básicos del recién nacido:

Cordón umbilical

El cordón umbilical es el conducto que une el feto a la placenta y sirve de conexión entre la madre y el bebé en la etapa fetal. Tras el nacimiento, el cordón umbilical se corta y queda únicamente una pequeña porción.

Este pequeño resto de cordón umbilical caerá a las dos o tres semanas de vida del bebé. Hasta entonces, es necesario hacer curas varias veces al día.

Se deberá cambiar las gasas que lo envuelven y comprobar que no existe pus o huele mal. Es importante que el pañal se coloque por debajo del cordón para que éste se seque y pueda así desprenderse.

Llanto

A partir del cuarto día de nacimiento el bebé llora más frecuentemente, los llantos se producen por diferentes motivos y poco a poco los padres aprenden a diferenciarlos.

Hambre, sueño, incomodidad, dolor, gases o malestar son las principales razones por las que un bebé llora.

También es posible que se sienta desprotegido y simplemente llore para captar la atención, porque necesita el calor y tacto de sus padres.

Acudir tras su llanto no es malcriarlo, ayuda a crear el vínculo familiar. No obstante, no debéis alarmaros ni preocuparos en exceso ante cada llanto del bebé; debéis pensar que ésta es su forma de expresarse.

Ictericia

Aunque es algo común, no aparece en todos los recién nacidos. Se produce cuando la piel y la parte blanca del ojo del bebé adquieren un tono amarillento.

La razón principal de que los bebés adquieran este color es el hígado, pues en los primeros días de vida el hígado del bebé no está listo para filtrar toda la sangre.

El tono amarillento irá desapareciendo gradualmente a partir del cuarto o quinto día de vida. En caso de que la ictericia persista, se deberá acudir al médico inmediatamente, ya que puede ser indicativo de fallo hepático.

Sueño

Un bebé necesita dormir en un colchón firme, sin peluches ni juguetes, ya que es demasiado pequeño y podrían molestarle.

Es recomendable que el pijama tenga un cuello ancho, para que no le apriete y pueda tener libertad de movimiento en la cabeza. La postura adecuada para dormir es de lado y con cuidado de que el cordón umbilical no toque el colchón.

Los estudios científicos relacionan el dormir sobre la espalda con la muerte súbita. Además, al dormir de lado, si vomita o expulsa mucha saliva o líquido, no existe peligro de que se trague el vómito y se asfixie.

Lactancia materna

Al contrario de lo ocurrido con el biberón, controlar la cantidad de leche que consume el bebé en la lactancia materna es muy complicado.

Muchos bebés se agotan durante el amamantamiento y eso puede dificultar la ingesta de la cantidad suficiente de leche para su crecimiento adecuado. En estos casos, es importante seguir las indicaciones del médico, pues si al bebé no le llega el alimento suficiente, se recomendará alternar o sustituir la lactancia materna por el biberón.

En este sentido es fundamental realizar los chequeos marcados en relación a la estatura y peso del bebé para controlar el crecimiento y desarrollo del bebé.

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Autor

 Cristina Mestre
Cristina Mestre
Embrióloga
Licenciada en Ciencias Biológicas, Genética y Reproducción Humana por la Universidad de Valencia (UV). Máster Universitario en Biotecnología de la Reproducción Humana Asistida por la UV con el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI). Embrióloga en IVI Barcelona. Más sobre Cristina Mestre

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