¡Hola! Espero que se encuentren muy bien y disfrutando de los recursos que la tecnología nos ofrece hoy para conocer sobre temas de la fertilidad y la planificación familiar.
Escribo para plantear el siguiente caso que tanto a mí como a mi pareja nos ha causado no poca confusión, y que yo creo puede reflejar lo que otras personas han pasado, tiene que ver con los resultados en las pruebas de embarazo y los famosos falsos negativos o falsos positivos.Mi pareja y yo tuvimos actividad sexual riesgosa (entiéndase, que podría resultar en un embarazo, durante el periodo de ovulación) en la penúltima semana de abril de este año, fue un contacto mínimo por lo que no le dimos mayor consideración, pero nos llevamos una sorpresa cuando 14 días después se retrasó el sangrado del periodo correspondiente, solo habían manchas ligeras, sospechando sangrado de implantación, recurrimos a una prueba sanguínea cuantitativa en el quinto día de retraso, el resultado fue negativo, y un día después llegó el flujo abundante junto con todos los síntomas que lo acompañan.
Un mes después, habiendo pasado mi pareja por un fuerte episodio de estrés emocional, tenemos otro retraso, al cuarto día mi pareja hizo una prueba de orina que resultó positiva. Más tarde hizo otra, esta fue negativa, al día siguiente hizo una adicional, también fue negativa, al séptimo día de retraso acudimos a hacer una sanguínea cuantitativa en un laboratorio distinto, y de nueva cuenta tuvo un resultado negativo, nótese como la ansiedad nos llevó a hacer cuatro pruebas en el plazo de una semana, hoy se acumulan casi 10 días de atraso, notamos fuertes cólicos y síntomas premenstruales, pero el flujo no aparece aún, esa prueba positiva nos ha desconcertado, ¿qué opinan? ¿Les ha pasado algo así? ¡Gracias por sus comentarios!
14/06/2022 a las 22:23
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