Un grupo de investigadores del Centro de Pediatría de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile ha realizado un trabajo para conocer cuánto beben las embarazadas chilenas en el embarazo y qué consecuencias tiene para los niños este consumo.
Encuestaron a 9628 mujeres embarazadas. El 42,6% dijo que no bebía alcohol mientras que el 57,4% reconoció haber bebido “algo de alcohol” durante la gestación. Sólo el 3,7% de las encuestadas bebía en cantidad de riesgo para el feto, es decir más de cuatro copas de vino al día, equivalentes 48g de alcohol.
Se realizó un seguimiento del embarazo a cien de estas mujeres y se controló el desarrollo neurológico de sus hijos desde los seis meses de vida hasta los siete años. También se realizaron exámenes psicológicos y de desarrollo motor durante este periodo. Los resultados se compararon con los de otras cien mujeres de un grupo control.
El 44% de los niños de madres que bebían alcohol presentó algún grado de daño neurológico, desde retraso del lenguaje hasta otros más graves como trastornos motores o bajo coeficiente intelectual.
Riesgo de síndrome alcohólico fetal
También se estudió si estos niños presentaban Síndrome Alcohólico Fetal (SAF), una malformación genética debida al consumo de alcohol materno que se caracteriza por labio superior fino, ojos pequeños y mayor distancia entre la nariz y el labio.
El 40% de los niños presentaba alguno de estos rasgos faciales, mientras que el 8% los presentaba todos. Por otro lado el 13% tenía bajo peso al nacer y el 3,5% presentaba desnutrición.
Los porcentajes fueron mucho menores en los niños del grupo control.
Muchas embarazadas no son conscientes de las graves consecuencias que puede tener consumir alcohol durante el embarazo, pero estudios como este revelan el peligro que conlleva.
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