Día Internacional de los Niños Prematuros

Con motivo de la celebración del día internacional de los niños prematuros, el pasado 17 de Noviembre de 2011, el Dr. Manuel Sánchez Luna, vicepresidente de la Unión Europea de Neonatología y Medicina Perinatal ha informado acerca de la tasa de nacimientos prematuros en España. En la actualidad dicha tasa oscila entre el 7 y el 8%, con respecto al 10% anual en el mundo, según los datos de la OMS (Organización Mundial de la Salud).

¿Qué es?

Se considera que un niño es prematuro cuando su nacimiento ocurre antes de la semana 37 de embarazo. A partir de esta semana se consideran nacidos a término. Son niños en general con un nivel de madurez inferior a lo requerido y precisan a menudo de hospitalización para sobrevivir fuera del útero materno. Es cierto que un niño con 37 semanas de embarazo tiene una tasa de supervivencia muy alta y secuelas prácticamente nulas pero no debemos olvidar que estos casos suponen un coste sanitario nada despreciable.

Atención sobre la prematuridad

En caso de que el nacimiento se produzca por debajo de la semana 27 de embarazo la situación se complica considerablemente puesto que el peso de los bebés suele ser muy bajo y estos niños sí tienen ya graves problemas de supervivencia y en el mejor de los casos, secuelas. De hecho, el tiempo de gestación es vital, por debajo de la semana 26 de embarazo la probabilidad de supervivencia se sitúa en torno a un 60% mientas que por debajo de los 6 meses las probabilidades son prácticamente nulas.

Problemas

Tal como hemos comentado en función del nivel de prematuridad podremos encontrar diferentes grados de problemas en los bebés, tanto en cuanto a sus probabilidades de supervivencia como en cuanto a las secuelas que puedan padecer.

Riesgos

El desarrollo del organismo no se ha completado de modo que presentan dificultades de adaptación para vivir fuera del útero de la madre. Suelen presentar problemas de desarrollo y crecimiento, problemas hormonales, etc.

Los riesgos pueden ir asociados al momento del parto, como pueden ser la transmisión de infecciones o complicaciones del mismo parto, o bien como consecuencia del nivel insuficiente de desarrollo del feto que hace que pueda haber incluso problemas para mantener con vida al bebé. Como comentábamos anteriormente, por debajo de la semana 26 la probabilidad de supervivencia es del 60% mientras que entre las semanas 26 y 28 supera el 90% y el riesgo de padecer secuelas disminuye también.

Secuelas

En función del nivel de desarrollo con el que nazcan estos bebés las secuelas pueden ser muy variadas, desde problemas de peso y medidas, que suelen ser frecuentes hasta complicaciones más severas como puede ser insuficiencia respiratoria, discapacidad motora, neurosensorial o neurológica, problemas infecciosos, etc.

Bebé pretérmino

El nivel de secuelas ha ido aumentado a lo largo de los años, no por sí mismo sino como consecuencia de unos mayores índices de supervivencia. También es verdad que la severidad de las mismas es menor, tendremos por lo tanto más adultos prematuros y unas secuelas más leves. Si nos atenemos a datos de peso, los niños nacidos con bajo peso, por debajo del kilo y medio presentarán secuelas en la mitad de los casos, siendo su índice de supervivencia del 85%.

Causas

Existen una serie de circunstancias asociadas a la gestante y al embarazo que contribuyen a que pueda darse un parto prematuro, algunas de ellas pueden ser: anatomía del cuello de útero (cuello debilitado, insuficiente, etc), antecedentes de partos prematuros, preeclamsia, placenta previa, anomalías congénitas de útero, etc.

Además de todas estas circunstancias, se ha visto cómo el modo de vida puede afectar a los riesgos de sufrir un parto prematuro. Así, el retraso en la edad materna como consecuencia generalmente de sus obligaciones laborales, los hábitos poco saludables tipo alcohol, tabaco, etc, pueden tener una gran influencia en la prematuridad. Sin embargo, cabe reconocer que el 40% de los casos son de origen desconocido.

El gran objetivo ahora es no solo la mejora de la supervivencia de estos niños prematuros y la minimización de secuelas, sino también hacer disminuir el número de casos en la medida de lo posible.

Por supuesto serán importantísimas las primeras horas de vida del recién nacido ya que en ellas se juega su vida y también la severidad de las secuelas que puedan quedar. En España hay equipos multidisciplinares altamente especializados que realizan una gran labor, de hecho se considera que España está a la cabeza en cuanto a nivel asistencial en este sentido.

Además del equipo médico, por supuesto, es de gran importancia la labor que realicen los adultos a cargo de los niños ya que son ellos los que van a ejercer de cuidadores las 24 horas del día. Para ellos afrontar esta prematuridad requiere de todo un aprendizaje que empieza por perder el miedo a la situación y conocer bien las consecuencias. Cabe todavía trabajar en la concienciación sobre estas situaciones y con este objetivo se celebran y reivindican días como el pasado 17 de Noviembre.